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En esta segunda parte de la Puerta de Bisagra nos centramos en la parte artística. Conoceremos también una leyenda que protagoniza un ángel que hay en esta puerta con la peste.
Pues si amig@s, seguimos con la segunda parte de la Puerta de Bisagra, en esta ocasión nos centramos en el arte.
Tiene dos fases de construcción, una primera de tiempo de ocupación musulmana y una segunda realizada después de la toma de Toledo por Alfonso VI.
De la primera fase nos queda poco vestigios, unos sillares en la parte interior de la Puerta de Bisagra y de la fachada interna de la puerta, sillares encontrados a raíz de la reforma que sufrió, y que finalizaron en el año 1934, para quitar las viviendas que estaban unidas a la misma y a las murallas.
Vista del patio de la Puerta de Bisagra (Toledo).
La segunda fase de construcción es como la conocemos actualmente. Reinando Carlos I de España y V de Alemanía y siendo Toledo capital de España, decide levantar una puerta que hiciese honor a la ciudad y su capitalidad, de ahí podemos entender su ornamentalidad y grandiosidad con respecto a los demás accesos a la ciudad histórica.
Esta reforma fue llevada a cabo por varios artistas, siendo Alonso de Covarrubias en el año 1548 quien se encarga de la remodelación, finalizado la obra en 1576, reinando Felipe II.
Está formada por dos cuerpos independientes unidos por unos altos muros almenados, formando un patio en su interior. La parte de la puerta que da al exterior de la ciudad pertenece íntegramente a la reforma de Alonso de Covarubias, formado por un arco de triunfo de medio punto construidos con sillares de piedra almohadillados y que está coronado por un escudo de la ciudad, un águila bicéfala, y a cada lado del arco un torreón de planta circular rematados en almenas, construidas en mampostería.
Detalle Puerta de Bisagra. Escudo de Toledo.
La parte que da hacia el interior de la ciudad está formada por dos cuerpos independientes con altos muros. El acceso es por medio de un arco de medio punto, flanqueado por dos torres de base cuadrada rematadas en chapiteles con tejados a cuatro aguas, las tejas son cerámicas alternando el color blanco y el verde en forma ajedrezada, teniendo en una de sus caras el escudo imperial de Carlos V, escudo de la ciudad. Este escudo también se puede ver en el dintel interior de esta zona de la puerta.
Águila Imperial de Carlos V.
Fotografía nocturna de la Puerta de Bisagra con la decoración de navidad. Realizada por Jacinto Sánchez.
Escultura de Carlos V situada en el patio de la Puerta de Bisagra, Fotografía realizada por Jacinto Sánchez.
Esta puerta la puedes conocer mediante nuestra Ruta de Puertas y Murallas de Toledo.
La leyenda:
Cuenta la leyenda que Toledo sufrió una epidemia de peste, cuando ésta quiso entrar en la ciudad por la Puerta de Bisagra, el Ángel Guardián que corona el acceso a la ciudad desde este punto dio el alto a la peste blandiendo su espada, a lo cual la peste le comunicó que tenía permiso de Dios para matar a siete toledanos, ante esto el ángel le dejo pasar. La peste mató a 7000 ciudadanos. Al salir de la ciudad la peste, el ángel le reprochó que le había mentido: ¡me dijiste que matarías a siete y han muerto siete mil! A lo que la peste contestó: Sólo maté a siete los demás murieron de terror.
Ángel Guardián de la Puerta de Bisagra (Toledo)
Con esta leyenda os dejo hasta la próxima.
Un saludo.
Nacho Cánovas.
